El otro día en la consulta de la neuróloga me dí cuenta de que hay algo que tengo que corregir y que tengo que explicar mejor.
Mientras iba actualizando con ella todos los síntomas que ya tenía antes y los que han llegado nuevos ella vió en su ordenador mi último test de memoria y me he dado cuenta de que he estado hablando con vosotros algo que no está correcto del todo.
Siempre os digo que tengo la misma memoria de Dory (de buscando a Nemo) y es completamente cierto! os lo aseguro!
Ya tenía una memoria “dañada” a raíz de mi experiencia con la violencia de género y el shock por estrés postraumático que me causó y ahora con la esclerosis múltiple ya hemos rizado el rizo! Pero además de eso con la esclerosis tengo una capacidad de atención que va mermando con el tiempo.
Es decir, estoy leyendo un libro y de repente me doy cuenta que tengo que volver atrás porque no tengo ni idea de lo que he estado leyendo.
O en una conversación con otra persona, hay momentos en los que mi cerebro se apaga y claro! ahí no puedo darle a las páginas para atrás.
O por ejemplo en mis clases de aqua gym, la profesora nos explica el ejercicio que tenemos que hacer y justo cuando voy a empezar… ¿??¿?¿? se me ha olvidado! así que tengo que volver a preguntarle lo que tenía que hacer! Esto me pasa muy a menudo!
En conversaciones con mi marido por ejemplo: Me dice algo, por ejemplo: el martes tengo que ir a casa de pepito. Y a los dos minutos yo le pregunto ¿a casa de quién? cuando?
Lo sé! mi marido se merece que le pongan su nombre a una calle por la paciencia!
Que paséis un fin de semana maravilloso compis!!
Os mando un abrazo enorme!