Buenos días queridos compis!!
Como cada sábado vengo a pasar un ratito escribiendo para vosotros. Hoy me apetece contaros una situación “graciosa” que me sucedió en mi viaje a Madrid.
Cuando estaba preparando la maleta para ir le dije a mi marido que iba a llevar un pijama suyo que tiene muy gordito y calentito! Es un mono enterizo muy cómodo aunque para ir al baño te tengas que quedar en pelotas! jajaja
Y él me dijo “llévate este mono que también es calentito porque con el que tú dices vas a pasar calor! Además quién te vea con esos pijamas, flipa!” y mi contestación fue: “No sé los planes que tienes tú para estos días en los que yo no voy a estar pero yo no creo que nadie me vea en pijama, la verdad” y los dos nos reímos.
Cuando aterricé en Madrid, tenía la entrevista con Elena esa misma tarde, así que después de llegar de la entrevista me dije ¡Vamos a tomarnos una coca cola fresquita antes de cenar ya que no hay prisas por la cena y la hora como en casa con los peques! Y así lo hice! Disfruté estando sola, tomando mi refresco, viendo a la gente, viendo el móvil y después me compré un bocata para cenar en el hotel cómoda con mi pijama y viendo la tele!
Cuando me fuí a poner a dormir, me dí cuenta que no tenía que poner despertador!!! Qué gozada! así que me fuí a dormir encantada! hasta que…
… a las nueve de la mañana despierto con el ruido de tres o cuatro taladros en la misma planta del hotel! ¡Que dios nos coja confesados! Soy una persona muy alegre y que por mi experiencia vital no soporta los gritos, las discusiones o los conflictos pero también tengo mucho carácter y en este caso el carácter tenía que salir!
Me desperté con pelos de loca, mi pijama (el que veis en la foto) y me puse unos mocasines que tengo que tienen como perlitas (en alguna foto los habéis visto seguro) y salí de la habitación sin muleta de lado a lado y al llegar a recepción me encuentro a cinco chicos y al recepcionista que se me quedan mirando con cara de flipados (no sé por qué! jajajaja) y sin gritar les digo “ disculpad pero a mí no me parece normal que me despierten en un hotel a las nueve de la mañana con taladros! No sé si a vosotros os lo parece pero a mí desde luego que no!” y me dí la vuelta rumbo a mi habitación!
No se oyeron más ruidos esa mañana! la verdad es que recién levantada no soy Pilar Rubio después de un parto, pero joder! tampoco asusto tanto! jajajaja
Al final sí que me vieron en pijama! Lo tendré en cuenta la próxima vez!
Espero haberte sacado una sonrisa! y que hoy tengáis un día maravilloso con muchas sonrisas más!
Gracias de todo corazón por estar!
Es impresentable cuando están de obras en hoteles, y a esas horas🤬! Algo intuía tu marido y efectivamente sí tuviste quien te viera en pijama🤣, el cual por cierto me parece chulísimo👍.
Lo que me he reído imaginando la situación poniendo firmes a los trabajadores 😆 Si es que cuando una gallega se enfada…
Tienes toda la razón. Ellos están trabajando pero tú descansando. Hay momentos y momentos. Un saludo.